Por Florencia Bonanno
Del 23 al 25 de Septiembre (2018), el presidente argentino Mauricio Macri, viajó a los Estados Unidos con una agenda ajustada que incluyó desde encuentros con funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI), empresarios y medios financieros, una reunión con el mandatario estadounidense Donald Trump e inclusive la recepción del premio “Global Citizen Award” – Premio al Ciudadano Global-, entre otros. Asimismo, Macri participó del debate en la 73° Sesión de Asamblea General de Naciones Unidas.
Luego de 2016, Macri volvió a dar un discurso ante dicha organización internacional, pero ésta vez en un contexto no demasiado favorable para nuestro país, producto de la crisis económica. Justamente, el discurso comenzó haciendo alusión a esta situación, ya que además, ese mismo día, Argentina se vio afectada por el cuarto paro nacional de la Confederación General del Trabajo (CGT) y por la renuncia del entonces presidente del Banco Central, Luis Caputo. Al respecto, el mandatario agradeció a cada uno de los argentinos y sostuvo que nuestro país está atravesando un “período de cambios profundos” a la vez que se están “haciendo los esfuerzos correctos”.
Por otra parte, Mauricio Macri expresó su convencimiento acerca de una “inserción argentina inteligente”, temática que abordó durante toda su intervención. En relación a esto, sostuvo que que la integración inteligente es el aporte de nuestro país para la construcción de una región y un orden global estable, inclusivo y respetuoso de la paz, la democracia y los derechos humanos. En este sentido, el hecho con mayor repercusión fue el anuncio de que Argentina denunciaría a Venezuela por delitos de lesa humanidad ante la Corte Penal Internacional junto a otros cinco estados (Chile, Colombia, Canadá, Perú y Paraguay). Además, hizo hincapié en que el mandatario Nicolás Maduro, debería reconocer la crisis humanitaria presente en su país, situación que éste último negó durante su propio discurso. Macri, recalcó el hecho de que Argentina recibió un total de 130.000 venezolanos durante estos últimos años, al tiempo que subrayó las pésimas condiciones sanitarias y alimentarias con las que arriban los desplazados.
El discurso del presidente argentino también aprovechó la ocasión para realizar un reclamo no menor acerca de los derechos soberanos legítimos e imprescriptibles sobre las Islas Malvinas. A su vez, destacó la nueva fase de relaciones bilaterales con Reino Unido, la cual atraviesa un deshielo desde 2016, para poder plantear el histórico reclamo desde una postura que incluye un diálogo amplio y positivo.
Otro llamamiento que Mauricio Macri hizo con fuerza, fue la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo. En relación al último, hizo mención a los atentados ocurridos en la Embajada de Israel (1992), AMIA (1994) y en New York (2017) que tuvieron como saldo a una gran cantidad de víctimas argentinas. También pidió a la comunidad internacional que coopere frente a estas amenazas, sin dotar de inmunidad diplomática a los imputados por estos hechos, como el caso de Rusia con el ex Canciller iraní dentro de la Causa AMIA.
La “inserción inteligente” del discurso Macri tampoco podía dejar de lado la importancia y el llamado al multilateralismo. Se trata de una temática recurrente en los discursos del presidente, tanto en las reuniones del G20 como en la Cumbre de los BRICS, en donde el consenso parece ser una pieza fundamental para la política exterior argentina. Cabe destacar, que esta estrategia cobra aún más sentido si se tiene en cuenta que nuestro país durante el 2019 volverá a ser sede de otro gran evento como lo es la Conferencia de Alto Nivel sobre la Cooperación Sur-Sur y en 2020 de la Conferencia de Examen sobre el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP). Estos eventos representan una gran oportunidad para que Argentina adquiera un nuevo liderazgo. Además, manifestó su compromiso con el Acuerdo de París y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, indicando que estos son pilares fundamentales de las políticas del gobierno argentino en materia de cambio climático, igualdad de género y erradicación de la pobreza.
Para concluir, en el discurso de 11 minutos de la administración Macri podemos ver que el concepto “inserción inteligente” logró hacer alusión a las temáticas más urgentes en la agenda de la comunidad internacional, sin perder de vista los objetivos de política exterior de la administración argentina de turno. Mauricio Macri viajó a los Estados Unidos intentando mejorar la percepción internacional de nuestro país ante la crisis, y en su discurso ante Naciones Unidas se vio plasmado uno de las tantos intentos por recuperar la confianza internacional. Sin embargo, aún queda un largo camino que recorrer.